
Tobalaba con Providencia, bajada más próxima a mi hogar y lugar cercano a uno de los tantos centros callejeros de trabajadoras nocturnas, nunca ausentes de gritos y amenazas en una mezcla de piropos ciegos. Nuevamente levanto mi escudo de sordera y pienso que la felicidad está en las cosas simples, en momentos de compartir y sentirse conectado. El lugar es circunstancial, pero el hecho de hacer cosas juntos hace que los escenarios se hagan realidad. Luego de unas cuadras de frío, llego a mi departamento, sin antes la conversación ridícula del conserje snob, que en realidad no posee conciencia de que lo único que quiero es llegar a dormir. Me habla de la delincuencia, de sus actos heróicos y sus cualidades bilingües... like i give a fuck. Botón siete y abro la puerta. Me dispongo a dormir, pero antes me dan ganas de escribir un poco. Prendo mi laptop ya acostado, pongo "Couldn´t Care Less" de The Cardigans, me tomo una pausa... y pienso que extraño su perfume en mis almohadas y su sonrisa.
"4:30 am..."